YO ME EMPLEO, TÚ TE EMPLEAS, ÉL SE EMPLEA, ELLA SE EMPLEA...

Nosotros nos empleamos... parece que no hay otro motivo para la vida, parece que es para lo único que un ser humano es útil, en caso tal de que no se emplee entonces es un total fracasado, es una persona improductiva que no sabe qué hacer con su vida; y entonces el que tiene empleo es el Pavo Real del Zoológico. Siempre pienso, pobre gente, pobre la gente que se emplea, pobre aquella que trabaja sin convicción, rescato aquellos que mantienen íntegra su dignidad a pesar del salario, es decir los que trabajan en donde les gusta, los que se sienten cómodos con ser obreros de una empresa, los que lo disfrutan la verdad, son de rescatar. Creo que nacieron con carácter de perritos y no sufren cuando se humillan.

Tampoco creo que sea muy positivo y halagador pasar la vida detrás de un mostrador en una tienda de barrio, creo que eso tiene sentido si trae progreso para mí, entendiendo el progreso como un avance social de mejoramiento de condiciones. Bueno la gente no tiene más opciones y es un éxito social ser el tendero del barrio, imaginen la clase de liderazgo en nuestra tierra. Eso si el trabajo no es deshonra, pero debería serlo.

Quiero aclarar una cosa, tengo en cuenta que todos nos ocupamos, que todos nos empleamos, sólo que algunos, la mayoría; lo hacen por sobrevivir sin pensar en lo que hacen con su vida, otros los que se suponen van a la Universidad quieren construir su hoja de vida para un empleo mejor... la única diferencia entre el obrero razo y el obrero de corbata es la forma de hablar, pues el proceso operativo ha sido pensado por otros.

Es terrible decirlo, pero creo que el mundo requiere de mano de obra y eso es claro para algunas personas que se conforman con ello, les gusta ser la mano de obra y es más creen que la vida les debe por su desgracia... abruma, lo sé, abruma.

El empleo es una condición de supervivencia, la gente que va la Universidad, bueno no toda, pero sé que es la mayoría, haga la prueba, pregúntele a cualquier Universitario que hará cuando termine y 8 de cada 10 le dicen, "estoy pasando hojas de vida"... perdió su platica y su tiempo; bueno el cuento es que esta gente se prepara cinco años para emplearse, para mejorar su salario, para tener un mejor jefe, para tener un mejor empleo, entonces la profesionalización ¿qué es?, me rehuso a pensar que la educación de un ser humano, el encuentro con la historia y con el conocimiento conduce también a una vida de superviviente, no hay diferencia con los animales pues únicamente cambiamos los medios para sobrevivir, pero hacemos exactamente lo mismo, sobrevivir, reproducirnos y morir.

Es posible que la Revolución Industrial y la naciente Revolución Tecnológica sean la consecuencia del pensamiento  de los que consideran que el ser humano "racional" tiene otro objetivo en el mundo, tiene el objetivo de mejorar las condiciones, de intentar encontrar las irónicas respuestas que buscamos, ¿para qué venir al mundo?, ¿en dónde estamos?, qué hay detrás de todos nosotros?; esas reflexiones existenciales de repente se podrían resolver con un ser revolucionario. Si lo creo. Lo sé.

La revolución no es alzarse en armas, o pensar como comunista hippie, no es ser rebelde frente al supuesto sistema, la revolución es entender la historia y comprender entonces que debemos "vivir" la vida, no "sobrevivirla", imaginen la verdadera revolución es "vivir", de seguro porque pocas personas lo hacen.

Por mi condición de artista muchas veces he visto y escuchado cómo se subestima a quien toma otra opción, a quien va por un camino poco común, por el camino del "fracaso" desde la perspectiva material del comun de la gente al que le apuesta a otra forma de ver la vida como si fuese menos lucrativo, como si no fuese un camino seguro, si se gana un salario mínimo, eso ya es suficiente para reconocer que alguien tiene talento, que alguien es especial, que alguien es de admirar.

Nuestra peor condena como pueblo es la ignorancia, lo lamento, pues me toca sufrir las consecuencias del pensamiento de seres que no les interesa ni tan siquiera un poquito asumir que son inteligentes, que tienen capacidades superiores, esa ignorancia es la que brota de los labios de las personas que sólo ven el éxito si alguien tiene un empleo.

Ahora es claro, la Cuestión no es si es o no es artista, la cuestión es ¿cuánto gana?, ¿quién lo emplea? y ¿qué tantas cosas puede comprar?.

Terible destino el del intercambio, terrible destino el del capitalista que debe emplearse para atesorar lo poco que pueda atesorar o mantener el equilibrio de sus créditos y morir endeudado esta vida y la otra, terrible el destino el de la mediocridad, terrible destino el de "socialista", el "comunista", creame que yo ya no sé la diferencia entre los conceptos pues cada quien los usa a su conveniencia, terrible compartir entonces las supuestas ganancias del empleo para enriquecer a los líderes de un Gobierno que parte de la voluntad de la equidad, cuando el ser humano que lidera esa masa de personas no puede escapar a sus ambiciones personales... terrible destino el que nos espera si no dejamos de pensar que nacimos para emplearnos, para renunciar a soñar, a pensar que la vida puede ser lo que yo quiero, hacer de mis ideas una realidad y sobre todo a tener tezón, fortaleza, carácter para soportar el peso de lo que me atrevo a soñar.

Eso hace falta en este país, perseverancia, carácter, inteligencia.

La Soberbia en escena

Esta obra fue un proceso tan difícil, tan duro que casi no estrena, el trabajo con los actores fue tenso e intenso, en algunas momentos muy divertido, en otros momentos muy estresante sobre todo porque compruebo que la "actitud" definitivamente es pieza clave en la consolidación de un proyecto escénico, si no existe armonía en los ánimos de las personas que conforman el equipo la obra nunca estará, nunca se podrá encontrar la imagen de la obra que se busca.

Desde siempre la dramaturgia de Federico García Lorca me ha llamado la atención, la disfruto, me gustan sus personajes, me gusta su poesía; siempre he querido montar "La Casa de Bernarda Alba", pero siempre termino en medio de la idea teatral presintiendo que la obra será otra cosa más del que llamo "Teatro Muerto"; y entonces ya no me gusta y viene el cambío, me rehuso a la contemplación, a la no vinculación del público con el drama de los personajes; por ello durante el último año las hijas de Bernarda no han sido posibles para el Teatro Vivo, sin embargo  logré escribir una obra inspirada en el drama lorquiano, como yo lo interpreto, como yo lo veo, como yo lo disfruto.

Creo que el accidente en mitad del proceso sucedió a mediados del pasado semestre cuando entonces dedicí que no debía ser Lorca, decidí que era una pieza corta que había escrito en el "Taller de Nueva Dramaturgia", la llamé "La Soledad" y así comencé a pensar el proceso, debía hacer un arreglo digno para la presentación de una obra en pueblos, en sitios donde el "Teatro" no es un lugar común. Justamente eso me hizo reevaluar  si la historia de las dos hermanas que se odiaban era demasiado intensa, demasiado "sosa" y hasta un poco "soberbia", creo que fue un pequeño arranque de ego porque cuando volví a tener esa obra en mis manos no logró convencerme, no logré pensarla para el público del Teatro Vivo. Finalmente "La Soledad" en la soledad de mis escritos quedó, sin embargo quiero recordarla, porque intenté llevarla a escena, lo intenté y ese intento determinó el proceso creativo.

"Soberbiwood", terminó siendo una comedia que disfrutamos mucho desde la lectura de libretos, pero que poco a poco se nos fue volviendo todo un drama. Desde el estreno en Caloto abriendo la Gira por el Cauca hasta su última función en la Casa Teatro de Popayán la obra ha ido creciendo y cautivando al público, aún tenemos mucho por resolver, pero Soberbiwood fue un riesgo que asumimos, sólo cuatro actores en escena, un sólo escenario y una comedia... ¡¡qué problema!!!, pero lo que pensé iba a ser un verdadero conflicto estético terminó dando más tranquilidad y una nueva oportunidad de proyectarnos como la primer Compañía de Teatro verdaderamente Nacional, con una estética que se redefine, que se puede reconstruir, que se puede pensar para todo tipo de públicos, el Teatro Vivo con "Soberbiwood" demuestra ser tan versatil como entretenido, como funcional para quien no se conforma sólo con ver.

Agradezco a los actores, a Martha por la que nadie daba un peso, pero que ahora es la figura más llamativa de la puesta en escena con su personaje de Eufemia, a Johana que desde siempre prometió un buen trabajo artístico, Orlando al que el temperamento le gana pero que ha logrado hacer un excelente personaje femenino lo que prueba que es un gran actor y Neiffy que con la abogada Hildebranda permitió el juego de rol, y entregó un personaje que da el toque final a esta nueva puesta en escena, cuatro actores y Kevin, Andy, Cristian y Angie que apoyan al elenco, este equipo sé que llevará a buen término esta controvertida y difícil creación de Teatro Vivo, espero que el público la reciba como las otras, espero no defraudar al público que nos hace visibles, que nos hace posibles.